Partiendo de la idea de que se trata de una conexión a internet inalámbrica, podría parecer que conectarse a una red WiFi desde el aire es pan comido. Sin embargo, conseguir una conexión a internet desde un avión es una tarea difícil y costosa.
Aunque la palabra “WiFi” está en el vocabulario de todos, no siempre es conocido su origen ni su funcionamiento. Recordamos que viene del término inglés Wireless Fidelity, que se traduce como “red inalámbrica”. Esta red establece una conexión a internet a través de un router o adaptador sin cables, que emite una señal reconocible solamente por aquellos aparatos compatibles con esta tecnología.
Funcionamiento de la conexión WiFi en los aviones
El WiFi utiliza ondas de radio para recibir y transmitir la conexión a internet, por tanto los aviones deben ser capaces de procesar esa conexión para poder ofrecérsela a sus pasajeros. Para que el avión pueda ofrecer a sus pasajeros conexión inalámbrica a internet, debe tener una antena receptora o una que le permita conectarse a algún satélite, así como contar con un punto de emisión de la conexión. Para ello debe tener instalado un sistema de cableado que conecta la antena del avión con distintos puntos WiFi fijados dentro del aparato. Para conseguir todo esto, ello existen tres métodos:
- Air-to-Ground, también conocido como ATG o aire-tierra. Utiliza las antenas de emisión dirigidas a los ciudadanos que ya existen alrededor de los pueblos y ciudades. Están orientadas hacia el suelo. ¿Cómo puede recibir la señal un avión? Debe tener instalada una antena receptora en la parte inferior del aparato que apunte hacia esas antenas “de suelo” para amplificar la recepción.
Debido a la distancia entre el avión y las antenas de emisión, la velocidad de conexión de este método es muy baja y solo es factible cuando el avión sobrevuela tierra. Además, existe la complicación añadida del cambio entre las diferentes compañías que ofrecen internet vía WiFi al cruzar territorios internacionales.
- Conexión por bandas “Ku” y “Ka”. Estas dos tecnologías solo se distinguen por la velocidad de conexión: es aceptable en ambas, la banda “Ka” es algo más rápida. En estos métodos, el avión se conecta a un satélite que, a su vez, se encarga de conectarlo a una antena en tierra dedicada exclusivamente a la conexión de los aviones.
- Excede. Este método también utiliza un satélite que conecta el avión con una antena ubicada en tierra. La velocidad es menor que la de las bandas “Ku” y “Ka”.
¿Qué problemas plantea la conexión WiFi en los aviones?
Son fundamentalmente dos. Uno derivado del uso de ondas de radio, y el otro del mantenimiento de satélites:
- La conexión inalámbrica de los aviones funciona a través de ondas de radio iguales a las que utilizan los teléfonos móviles, las televisiones y la propia radio. Los aviones ya emplean la radio para comunicarse con las torres de control, por lo que ambas pueden interferir, −de ahí que los azafatos soliciten la desconexión de aparatos electrónicos en el despegue y aterrizaje−.
- Es costoso mantener satélites con el único objetivo de proporcionar conexión a internet en el aire. En consecuencia, la mayoría de aerolíneas cobra altos precios por la conexión o incluyen un plus en el billete.
¿Qué aerolíneas ofrecen servicio WiFi?
Parece lógico afirmar que cualquier aerolínea ofrecerá WiFi gratuito con una conexión aceptable para el viajero en un futuro próximo. No obstante, mientras esperamos a que el WiFi gratis se convierta en algo habitual, ya vimos en artículos anteriores que existen 8 aerolíneas que lo ofrecen; otras también cuentan con ello, accesible previo pago.
¿Sabías que…?
Aunque nos puede parecer que la tecnología WiFi es algo relativamente moderno y creado en los últimos años, el origen de su creación se remonta a la Segunda Guerra Mundial, cuando la entonces activa actriz de Hollywood, la austríaca Hedy Lamarr, co-patentó un sistema de comunicación secreta con la intención de ayudar al gobierno de Estados Unidos a derrotar al ejército Nazi. Aunque los norteamericanos no utilizaron este invento hasta un tiempo después, Lamarr sentó las bases para el desarrollo de tecnologías tales como el WiFi o el bluetooth que tan corrientes nos resultan en su uso diario en la actualidad.