Nuestro país escala dos posiciones en el ranking elaborado por la Asociación de Congresos y Convenciones Internacionales. ¿Las claves del éxito? El clima, las infraestructuras y la buena conectividad que ofrece España.
Con un total de 564 eventos celebrados en 2017, España se convierte en el cuarto país receptor de turismo MICE, solo por detrás de Estados Unidos, Alemania y Reino Unido, escalando dos posiciones respecto a 2016, según datos de la Asociación de Congresos y Convenciones Internacionales (ICCA).
El clima, las infraestructuras y la conectividad de transportes que ofrece nuestro país lo han convertido en uno de los destinos favoritos para el turismo de negocios. Un sector, que solo en España, mueve alrededor de 19.000 millones de euros al año. Y es que nuestro país, además de gozar de un clima agradable, cuenta con infraestructuras e instalaciones de gran calidad. Desde un amplio abanico de hoteles, hasta palacios de congresos y recintos feriales capaces de albergar cualquier tipo de evento. Además, España es un país fácilmente accesible desde casi cualquier lugar del mundo, con buenas conexiones tanto en transporte aéreo, como terrestre y marítimo.
Además, España es el único país que cuenta con dos ciudades en el Top10 mundial. Una de ellas es Barcelona, que ocupa el primer puesto del ranking internacional, superando a París y Viena, líderes habituales de la clasificación.
Así, según Juli Burriel, consejero delegado de la Asociación Ibérica de Gestores de Viajes de Negocio (IBTA), en declaraciones al diario ‘El Español’: “España es un sitio increíble para el sector de reuniones, convenciones y congresos. A nivel europeo, está claro que es un referente”. Para Burriel, España “es la Florida de Europa. Ha elegido ser un país de servicios orientado tanto a vacaciones como a los congresos y los europeos saben que lo que se ofrece aquí es potente”. Asimismo, el consejero delegado de IBTA apunta que, además de Madrid y Barcelona, ciudades como Sevilla y Málaga se están afianzando también como destino a tener en consideración para el turismo MICE internacional. La clave de este incipiente éxito reside en el trabajo de promoción que ambas ciudades están llevando a cabo.
Este es un punto importante para las ciudades turísticas, ya que la aportación del turismo de negocios contribuye a desestacionalizar la demanda turística, aportando clientes a hoteles y restaurantes en los meses no estivales.
2017, punto de inflexión
Así, 2017 se erige como el ‘año de recuperación’ del sector MICE. Y es que el turismo de congresos y convenciones se vio bastante golpeado en la última década debido a las consecuencias de la crisis económica. Las cifras lo atestiguan: 8.000 eventos celebrados en 2017 y la previsión de que 2018 se cierre con una estabilización al alza en cuanto al número de participantes y duración de los eventos.
De hecho, de cara a este y el próximo año, el 57% del sector MICE prevé dos buenos ejercicios, según datos de la encuesta elaborada a principios de año por la asociación de directivos MPI entre sus asociados. Los resultados, asimismo, arrojan la previsión de que los presupuestos de viajes tenderán a incrementarse.
¿Qué es el turismo MICE?
>El turismo MICE (Meetings, Incentives, Conventions and Exhibitions) engloba turismo de reuniones, inventivos, convenciones, ferias y exposiciones.
>En definitiva, engloba un conjunto de corrientes turísticas cuyo motivo del viaje se vincula a la realización de actividades profesionales y laborales
Tendencias del Turismo MICE
> Uso de tecnologías > En un mundo cada vez más interconectado, la presencia de dispositivos como smartphones o tablets en cualquier evento es una realidad. En este sentido, el turismo MICE debe favorecer la interconectividad de las redes sociales , el uso de códigos QR o la elaboración de apps específicas.
> Wellness > Finalizar la jornada haciendo un turismo saludable, que persiga el relax y el bienestar del turista. Para ello, son muchas las opciones: balnearios, spas, centros de masaje…
> Sumergirse en la cultura del destino > Probar su gastronomía, conocer sus costumbres, participar de sus tradiciones…