Son muchos los esfuerzos de agentes públicos y privados que se dirigen a alcanzar la neutralidad climática en Europa. Si la semana pasada hablábamos de los esfuerzos realizados en este sentido en el ámbito aeronáutico, hoy ‘aterrizamos’ en el transporte ferroviario. Y es que la Unión Europea pretende impulsar el ferrocarril, como uno de los medios de transportes más limpios, para cumplir con los objetivos de neutralidad climática fijados por el Pacto Verde Europeo para 2050.
Ahora mismo, el ferrocarril es el medio de transporte colectivo más sostenible. Un dato que avala esta afirmación es que la emisión de gases de efecto invernadero por ferrocarril representa menos del 0,5% de la emisión producida por el sector del transporte en su conjunto. De hecho, según la Agencia Ferroviaria de la Unión Europea (AFE) en declaraciones a “Europa Hoy” recogidas por El Correo, entre 1990 y 2017, las emisiones directas del transporte ferroviario disminuyeron un 66%. El motivo, el proceso de electrificación al que se ha sometido la red ferroviaria, al tiempo que otros medios de transporte, sobre todo por carretera, aumentaron sus emisiones.
En esta línea, la comisión de Transporte del Parlamento Europeo, con el objetivo de crear una red ferroviaria ‘europea’, solicitó hace unos meses apoyo para las conexiones ferroviarias transfronterizas regionales y para acciones dirigidas a promover la finalización de la red transeuropea de transporte. Todo ello, con el objetivo de que los ciudadanos de la UE opten por viajar en tren entre las grandes ciudades de Europa.
En este sentido, un estudio de 2018 alertó que alrededor del 40% de las conexiones ferroviarias transfronterizas existentes en la UE no estaban operativas por falta de infraestructura, o por obstáculos administrativos, o no estaban completamente explotadas.
Una vez se mejoren las conexiones y encuadrándose en el marco del Pacto Verde Europeo, la Comisión Europea ha establecido una estrategia de movilidad sostenible en la que se contempla que el tráfico ferroviario de alta velocidad se duplique para el año 2030. Momento en el que se fija también, que todos los viajes en medios de transporte colectivos de menos de 500 kilómetros dentro de los límites de la UE, deberán ser neutrales en carbono.
“El ferrocarril no sustituirá a todos los vuelos en Europa, pero con el objetivo de duplicar el tráfico ferroviario de alta velocidad para 2030, el ferrocarril tiene el potencial de sustituir muchas conexiones aéreas entre capitales de la UE. Cambiar los viajes en avión -principalmente vuelos de corta distancia- y en coche por el tren es más eficiente desde el punto de vista energético y puede generar importantes beneficios ambientales”, explican desde AFE.
En este sentido, según un estudio reciente del Banco Europeo de Inversiones, una vez que se levanten las restricciones a la movilidad dadas por la emergencia sanitaria, “siete de cada diez personas encuestadas tienen la intención de volar con menos frecuencia por razones ambientales, optando por el tren en lugar del avión para viajes de corta distancia”.
Desde Diners Club Spain, permaneceremos atentos a los avances que se vayan produciendo en materia de movilidad para avanzar hacia la transición ecológica y animamos a todos los actores implicados a “no perder el tren” hacia la protección de la sostenibilidad del medio ambiente.